4 DESINFECTANTES NATURALES PARA FRUTAS Y VERDURAS
*Con información de Rocío Oblea Romero
En la cocina de hoy se necesita practicidad, pero también alternativas a los productos que solemos comprar en el supermercado. Una de ellas -y de vital importancia- es la manera en que desinfectamos las frutas y verduras que consumimos todos los días, o que ofrecemos a nuestros seres queridos.
Se denomina desinfectantes naturales a aquellos productos que, por su naturaleza, tienen propiedades antibacterianas o antimicóticas. A continuación, te presentamos 4 opciones que seguro tienes a la mano y que te servirán igual que esas gotitas que vienen en botella.
Limón: Quizá has visto que tu mamá, tu tía o tu suegra desinfectan la lechuga con limón. El limón es un antiséptico, astringente o blanqueador natural. Antes de usarlo, lava bien su cáscara con un cepillo. Ojo con las cantidades, pues no basta poner unas cuantas gotas al agua. Para un litro de agua, necesitarás 1/4 o 1/2 litro de jugo de limón. Esta mezcla es idónea para lavar verduras y frutas, como la fresa.
Agua oxigenada: Este tipo de agua es blanqueadora, desinfectante y fungicida, es decir, mata hongos. Es muy buena para desinfectar verduras que tienden a generar hongos, como los mismos champiñones o aquellas verduras que parecen tener lama luego de pasar tiempo en el refrigerador. Lava con esta solución ese tomate que todavía tiene salvación, no lo tires.
El agua oxigenada es fuerte así que no se recomienda su uso en cantidades altas o podría quemar la superficie de las verduras. Procura usar 10 ml (aproximadamente una cuchara sopera) por cada 250 ml de agua.
Vinagre: Otro desinfectante muy eficaz es el vinagre blanco, pues es antimicrobiano. También ayuda a quitar grasa así que otro tip es poner un chorrito a tu lavatrastes para que la grasa se despegue con mayor facilidad.
Para desinfectar verduras y frutas haz una combinación de agua y vinagre a partes iguales, o sea, 250 ml de agua y 250 ml de vinagre, por ejemplo.
En todos los casos se sugiere dejar reposar tu fruta o verdura por un lapso de 5 a 10 minutos.
Bicarbonato de sodio: además de ser un poderoso antibacteriano, puede cambiar el pH de las cosas. Cuando pones una cucharada de bicarbonato de sodio en agua, esta cambia de pH, lo que ocasiona que las bacterias mueran y se queden en el agua que desecharás. Esta opción puede ser muy fuerte para algunos paladares -por ello se recomienda dejar reposar solo 5 minutos-, incluso se puede percibir un cambio de sabor. Si te sientes inseguro, usa alguna de las otras opciones.
Un extra: Otra preparación eficaz es con vinagre, jugo de limón y bicarbonato de sodio. Se puede decir que su efecto desinfectante se potencializa, por lo que te puede servir bastante bien para lavar betabel, papa, poro, rábano, zanahorias y otro tipo de tubérculos.
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