Blog

Ya entrados en el otoño es tiempo de cambio. Renueva tu salón y conviértelo en el corazón del hogar, Ese lugar donde nos gusta estar cómodos, relajados, arrebujados en un sofá en compañia de los nuestros disfrutando de una merienda especial, una película en familia, o ¿por qué no? también de un momento a solas para nuestras aficiones…

¿Qué tal si le damos a este espacio un aire nuevo con un gasto mínimo? Renueva tu salón, vístelo con la calidez del otoño y los colores suaves de esta romántica estación. Te damos 10 trucos para que lo transformes sin que tu presupuesto se resienta aunque tu decoración sí lo note… y mucho.

Renueva tu salón decorando las paredes

Es una mejora que siempre funciona. A veces no necesitas nada más que modificar su color o decorarlas con papel pintado, molduras ornamentales, un zócalo de madera… y el resultado será realmente espectacular. He aquí algunas ideas para renovar el salón decorando las paredes.

1. Pinta una o dos paredes de un color distinto al del resto de la habitación. Por ejemplo, si el salón es blanco, resalta la zona de los sofás, o la destinada a comedor (para separarla del estar) con un tono en contraste. Con el blanco todos van bien, desde los suaves pastel a los más vibrantes, como el rojo, el verde turquesa, etc. Pero si tu salón está pintado en otro color que no sea el blanco, busca un color complementario o que dentro de su misma gama sea más intenso. Verás qué bien queda.

2. Papel pintado en tonos otoñales. También puedes llevar a cabo la idea anterior si empapelas con un papel de motivos relajantes y en una paleta cromática suave y otoñal. El papel pintado está de plena moda y es una magnífica herramienta decorativa para enmarcar o resaltar determinadas zonas.

3. Zócalos y molduras ornamentales. Crea entepaños pegando molduras de poliuretano en la parte alta de las paredes, en la unión con el techo, o coloca un friso de madera o de PVC y pinta la parte superior en un color bonito o empapélala. Estos elementos son muy fáciles de instalar y realzan los espacios, además de que permiten jugar con la altura y la percepción espacial.

Cuadros, espejos, fotografías, composiciones divertidas

Pero si no quieres “tocar” los revestimientos de las paredes, también puedes recurrir a estos complementos tan chulos y eficaces. No te estamos desvelando nada nuevo cuando te animamos a decorar con cuadros, fotografías o espejos, por eso te vamos a contar algo que te resulte práctico para disponerlos de tal forma que tengan efecto ¡wow!

4. Cuelga los cuadros de manera simétrica formando una figura geométrica, por ejemplo, un rectángulo, un cuadrado, incluso un círculo, pero delimitando una zona concreta. Por ejemplo, el equivalente al ancho de la mesa del comedor, o a la longitud del sofá… Si los colocas en la pared de una escalera, procura que tengan una disposición en diagonal, que “asciendan y desciendan” con los peldaños.

5. Espejos: haz combinaciones atrevidas de cuatro, cinco, seis espejos de distintos tamaños y con distintos marcos. Se llevan espejos vintage, con marcos facetados, auténticas obras de arte, o con marcos dorados muy barrocos, también son una buena apuesta los conjuntos de espejos envejecidos sin marco alguno…

6. Fotografías formato XXL, murales kingsize. Si quieres llamar la atención sobre un punto concreto del salón, elige una fotografía bonita o un mural realista y “empapela” con ellos una de las paredes. Es un recurso fácil, que queda de lujo.

Muebles, cámbiales el aspecto

La pintura es una gran aliada en este caso, pero también hay otros trucos que puedes utilizar para dar un toque refrescante a estas piezas anticuadas que tienes desde hace años. Renueva tu salón con estos pequeños cambios. Son sencillísimos.

7. Atrévete y pinta un mueble en un color fashion. ¿Qué tal un rojo pasión? ¿Un azul Klein? ¿Un verde limón? Si te decides, haz la prueba con una pieza que no tenga gran encanto a piori, verás cómo la transformas por completo y este elemento por sí mismo renueva tu salón como por arte de magia pintando tus muebles pasados de moda. Y ya, de paso, si cambias los tiradores por unos nuevos, el resultado será espectacular.

También puedes darle un aspecto desgastado con la técnica del decapado ornamental. No pasará inadvertido.

8. Adorna pantallas de lámparas anticuadas pegando cintas, cordones, borlas, flecos… etc. O fórralas con telas bonitas, llamativas, coloristas.

Textiles y plantas, qué no falten

Dan mucha vida y son una fórmula infalible para poner frescor y color en cualquier rincón de la casa. Renueva tu salón con macetas, centros y ramos de flores, y por supuesto con otro excelente recurso que nunca falla: decora con telas,cojines, plaids…

9. Llena tu salón de plantas, de ramos de flores, de centros hechos con frutas de estación -castañas, nueces, hojas amarillas, unas velas-. También puedes instalar un jardín vertical cerca de una ventana colocando macetas en una escalera de pared o en un palet reciclado.

10. Reutiliza colchas viejas y paños de cocina de los de algodón antiguo y haz con ellos fundas de cojines o mantitas para el sofá. Y si te aburren tus cortinas, estampa sobre la tela frases o dibujos con pintura especial y plantillas. ¡Verás qué bonitas resultan!