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Si por el trabajo, por la escuela o simplemente porque eres un apasionado de la lectura tienes una gran colección de libros en casa, seguro tienes este problema: ya no sabes dónde poner tanto libro.

Rentar una bodega no es buena opción porque quizá debes consultar tu biblioteca personal con frecuencia. Necesitas tener tus libros a la mano, pero sin que estorben, ¿correcto? Por ello te compartimos algunas soluciones que puedes aplicar en tu propia casa sin gastar de más.

Una buena opción para inspirarte es el de esta cocina diseñada con una isla en el centro. Es común que a veces no se aprovechen espacios como el de la parte inferior de esa pieza y es ahí dónde puedes entrar en acción. Basta mandar a hacer un librero a medida con o sin puertas, pero con las medidas adecuadas para que no rebase el mueble principal.

Klopper and Davis Architects

Si estás considerando cambiar tu sala, ¿por qué no aprovechar para usar la parte baja de los asientos como libreros? Esta idea también funciona para el baúl que se suele poner al pie de la cama o para la base de la misma, en lugar de un box sólido. Piensa que las partes bajas de los muebles rara vez se utilizan y ocupan una parte importante de las viviendas. Te sorprenderías de la cantidad de libros que puedes guardar en ellas.

Houzz

Al invertir el orden, el resultado es el mismo. En una casa con techos altos o normales, la parte superior rara vez se ocupa. Puedes poner repisas en todo el perímetro e incluso conectar las columnas estructurales que a menudo parece que sólo estorban.

llamazarespomes.com

Por último, puedes intentar reproducir los anaqueles de las bibliotecas en tu propio estudio. Basta con colocar unos extraíbles, como los que usamos en las cocinas para guardar la despensa, pero esta vez, para los libros. Hasta podrás organizarlos alfabéticamente. Y las ventajas adicionales: no se ven, no se ensucian, no tienes que sacudir ni preocuparte de que se caigan o se maltraten.

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